preguntas frecuentes

Elaboración

¿Cuál es el origen de la cera de abeja utilizada en las velas de Sannicolàs?

La cera de abeja utilizada procede de apicultores de la Península Ibérica que disponen de producción ecológica.

Las velas Sannicolàs están hechas a mano e individualmente. Según el modelo, se vierte la cera líquida en moldes o se sumerge la mecha en la cera. También pueden fabricarse de forma industrial, pero este no es el caso de las velas Sannicolàs

Se podrían blanquear con largas exposiciones al sol. También con la utilización de químicos, pero esta opción no encaja con los valores de la marca Sannicolàs. Conservar el color y el olor natural, sin manipulaciones de ningún tipo, es una de las cualidades de las velas Sannicolàs.

Uno de los valores de las velas Sannicolàs es precisamente mantener el color y olor natural de la cera de abeja. No hacerlo así desvirtuaría el concepto de preservar lo genuino que nos aporta este material producido por las abejas. Por otro lado, la cera tiene un color variable. Añadirle tintes, aunque sean naturales, podría producir un resultado extraño.

Se funde la cera y se cuela tantas veces como sea necesario para que no queden residuos. No se utiliza ningún producto.

Beneficios y diferencias con otros materiales

¿Cuáles son los beneficios de la cera de abeja?

Las velas de cera de abeja son beneficiosas para el bienestar porque, al quemar, producen iones negativos que neutralizan alérgenos y toxinas presentes en el aire. Además de ser un producto natural, el olor a miel que desprenden es dulce, agradable y facilita la relajación.

La cera de abeja utilizada es un producto natural y sin manipulaciones. La parafina se obtiene a partir de la destilación del petróleo. Con el fin de que pueda ser utilizada para producir velas se blanquea y limpia mediante el uso de diversos productos químicos. Estos productos producen emisiones cuando se quema la vela. También se añaden polímeros para elevar la temperatura de fusión y, casi siempre, se perfuman las velas con fragancias artificiales.

Porque tanto el material como su proceso de producción no tienen nada que ver.
La parafina, que es una destilación del petróleo, se obtiene a través de un proceso industrial. La cera de abeja es un producto natural y, si es de calidad, todos los procesos necesarios para prepararla con el fin de hacer velas son manuales.La buena cera de abeja escasea y por ello, a menudo, hay quien para ofrecerlas más baratas sólo incluye un pequeño porcentaje de cera, que combina con otros materiales.

Uso de la vela

¿Cómo decidir qué tipo de vela quemar en cada situación?

Es importante saber cuánto tiempo seguido va a permanecer encendida una vela para escoger adecuadamente el tamaño de la misma. Una vela de diámetro grande que se encienda sólo durante 30 minutos irá creando un hueco lleno de cera líquida en el interior y finalmente la mecha se ahogará. Si el tiempo durante el que se mantiene encendida la vela es breve, se recomienda utilizar velas de diámetro pequeño. Por el contrario, si se prevé encender una vela durante más 2 horas, se aconseja emplear velas de mayor diámetro.

Las velas deben colocarse sobre un buen soporte y en un lugar seguro. Es mejor que las mechas no sean excesivamente largas pero tampoco muy cortas. Aproximadamente 1 centímetro de mecha es correcto. Si se hace una capa de carbono en la punta de la mecha, se aconseja recortarla. Hay que evitar las corrientes de aire para no provocar goteos.

En el caso de las velas de mayor diámetro, como los pilares, simplemente se debe hundir la mecha en la cera fundida y enderezarla. Las velas más pequeñas, pueden apagarse con un apagador o soplando suavemente para que no salpicar con la cera fundida.

La cera de abeja, con el tiempo y los cambios de temperatura, puede desarrollar una pátina blanquecina. Esta pátina es un indicador de la pureza de la cera y es muy apreciada por los conocedores de la cera de abeja. Si se prefiere se puede sacar esta capa o pulir la vela. Simplemente hay que pasar un paño suave, o una media de nylon o de gasa con cuidado por encima de la vela.

Cuidado de la vela

¿Con qué frecuencia se debe recortar la mecha de una vela de cera de abeja?

Depende del tipo de vela que se utilice, pero en general se recomienda recortar la mecha cada 2 o 3 horas. Es interesante que la mecha no sea ni demasiado larga ni demasiado corta. Sobre 1 centímetro es correcto. De vez en cuando el carbono puede acumularse en la punta de la mecha. Si eso ocurre, es mejor recortar la punta un poco.

Cuando se enciende un pilar, debe tenerse en cuenta que necesita quemar durante un periodo de tiempo lo suficientemente largo como para que se funda todo el diámetro del pilar. Si se enciende por poco tiempo se irá fundiendo solamente la zona próxima a la mecha y se irá haciendo hueco hasta que ésta se ahogue.

La corrientes de aire y los movimientos rápidos alrededor de la vela son algunos de los factores que suelen provocar el goteo. Por lo tanto es conveniente evitarlos.

Manchas de cera

¿Cómo quitar la cera de una tela?

Si se ha derramado cera de abeja en un tejido, se debe poner el tejido en el congelador y luego descostrar la cera. También se puede cubrir con papel de cocina y pasar la plancha por encima del papel hasta que la cera sea absorbida por el papel.

La forma más fácil de sacar los restos de cera de abeja de un soporte es ponerlo en el congelador durante unas horas. Una vez fuera del congelador, hay que descostrar la cera y lavarlo con agua caliente jabonosa.